Tampografía
La tampografía es un proceso de marcaje en el que la imagen se transfiere a un tapón de silicona o goma. Este sello se impregna con tinta y, a través de un mecanismo, estampa la imagen sobre el soporte deseado.
La característica principal de la tampografía es su flexibilidad para imprimir en soportes que no son planos, incluyendo superficies curvas o rugosas. Esto la convierte en una técnica versátil, capaz de adaptarse a una amplia variedad de materiales y formas, lo que la hace ideal para productos como bolígrafos, mecheros y otros objetos con geometrías complejas.
Métodos de Procesamiento
La imagen se transfiere utilizando un tapón entintado, que puede tener diferentes tamaños. Este tapón imprime la imagen a la inversa para poder reproducirse correctamente sobre productos como bolígrafos, mecheros o ceniceros.
Ventajas del Proceso
Una de las principales ventajas de la tampografía es su flexibilidad, que permite imprimir sobre soportes que no son planos, incluyendo aquellos con formas curvas o rugosas. Además, el resultado es de alta definición y gran opacidad, permitiendo la impresión de cuatricromías e imágenes con tintas planas.
Desventajas del Proceso
La durabilidad de la impresión puede variar, dependiendo de la porosidad del material y las tintas utilizadas. Aunque la durabilidad es buena, es importante considerar estos factores.
Características de la Impresión
La tampografía ofrece la posibilidad de utilizar diferentes tipos de tintas, como tintas ecosolventes o tintas al agua, lo que amplía sus aplicaciones. Puede aplicarse sobre una variedad de materiales, incluyendo plásticos, porcelana, cristal, silicona y metal.